Queridos Lectores!
Edición de Julio 2016
Doy gracias a Dios en mis oraciones por todos ustedes
Tomo las palabras de San Pablo (Flp 1, 3-5) para agradecer a todos los que forman parte de la Familia Minutos de Amor por esta gran labor: desde el equipo que organiza y trabaja para llevar el Evangelio a sus hogares, hasta ustedes, que colaboran comprando el Manual de oración. De parte de nosotros, jóvenes que nos formamos y nos configuramos con Cristo Sumo y Eterno Sacerdote, solo nos queda decirles gracias, porque con su ayuda podemos costear nuestra formación en los diferentes seminarios del país. La grandeza de la vocación al sacerdocio está en el servicio; contarán siempre con nuestras oraciones y esperamos que en sus plegarias estén presentes las intenciones de nuestra vocación, pues en ellas está la fuerza para perseverar en nuestro camino. Que Dios todopoderoso los bendiga y María Santísima los acompañe siempre.
Seminarista Wilmer Fabián Martínez V.
Año de Pastoral
Seminario Santo Tomás de Aquino
Arquidiócesis de Nueva Pamplona
Norte de Santander
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Edición de Noviembre 2015
¡Dios nunca abandona a sus elegidos!
Doy infinitas gracias a Dios por el gran regalo que me hizo para seguirlo, para configurarme con Él, Sumo y Eterno Sacerdote para el servicio de su pueblo santo. Hoy, sigo respondiendo con gran amor y alegría a este llamado de confianza que Él me hace, preparándome de corazón en el Seminario Mayor Santo Tomás de Aquino, de la Arquidiócesis de Nueva Pamplona, de la mano de María Santísima, Madre de los sacerdotes. Este camino no lo he recorrido solo; por eso, agradezco al Señor por aquellas personas que nos ayudan en nuestra vocación, tanto de manera espiritual como de manera económica. Oramos para que el Señor siga protegiendo y llenando de bendiciones a la Familia Minutos de Amor por esta misión y compromiso evangelizador con el que apoyan nuestro proceso de formación. Que Dios todopoderoso los bendiga a ustedes escritores, suscriptores, lectores y distribuidores, por esa gran tarea que Dios les ha encomendado. Confío en que continuarán apoyando esta obra del Señor. Dios los bendiga.
WILMER FABIÁN MARTÍNEZ VILLAMIZAR
Seminarista de Teología
Arquidiócesis de Nueva Pamplona
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Edición de Septiembre 2015
UN HECHO QUE SE CONVIERTE EN EXPERIENCIA
Antes de hablarles de mi experiencia vocacional, les comparto que para llegar a ella parto de un hecho concreto llamado Jesucristo, quien me acompaña por medio de las personas que me rodean: familiares, amigos, compañeros y personas que conozco. Ellos me acompañan y me muestran el compromiso, la dedicación y el amor de la entrega total a Jesús. Por consiguiente, dentro de mi reflexión personal y en la oración, me di cuenta que quiero entregar completamente mi vida a Jesucristo, de manera que con mis acciones, palabras y gestos, pueda llevarlo a todos aquellos que me rodean sin importar nada. Es un compromiso grandísimo que adquiero, pero que con la ayuda de todos los que me rodean y de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, la Virgen María y San José, lo podré lograr. Dentro de este proceso formativo en el seminario, quiero agradecer a la Revista Minutos de Amor por su apoyo, colaboración y oración, ya que es muy valioso e importante para mí. Del mismo modo invito a todos los lectores para que no dejen de apoyar esta obra evangelizadora, pues con su ayuda acompañan y colaboran a muchos jóvenes que, como yo, quieren entregar su vida a Jesucristo en el sacerdocio. Nuevamente muchas gracias pidiéndoles su oración por mi vocación.
JUAN CARLOS LEÓN GONZÁLEZ
Seminarista – Diócesis de Engativá
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Edición Agosto 2015
“Bendigo al Señor en todo momento; su mano me sostiene y me bendice”
Hermanos, no tengo palabras para agradecer al Señor lo que ha hecho en mi vida, pues me ha redimido y me ha llamado a seguirlo desde el sacerdocio, al que ingresé el pasado 13 de junio, siendo ordenado diácono. Dando una mirada hacia el camino que he recorrido, mi corazón se llena de alegría y gratitud con cada una de las personas que me han apoyado en este proceso, no solo materialmente, sino con su testimonio y oración. De manera especial, agradezco a todos ustedes, Familia Minutos de Amor, porque su colaboración ha sido de gran ayuda en mi caminar. Me encomiendo a sus oraciones para que el Señor haga de mí un buen pastor. Del mismo modo, les ruego continuar apoyando esta obra del Señor, para que otros jóvenes sean sostenidos en su respuesta al Padre.
Diácono René Aldair Choachí Zabala
Seminario San Lorenzo Diácono y Mártir
Diócesis de Engativá
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Edición Abril 2015
“Las vocaciones nacen en la oración y de la oración; y solo en la oración pueden perseverar y fructificar” (Papa Francisco).
Agradezco a Dios el regalo tan inmenso de la vocación al sacerdocio que Él suscita para el bien de todos sus hijos. Hoy me preparo con mucha alegría para este servicio a la Iglesia de Dios, presente en la Diócesis de Duitama-Sogamoso, donde el Señor cada día muestra que me acompaña en este proceso, en la figura de personas que me ayudan con su oración y apoyo económico. Por tal motivo, encuentro especial esta oportunidad para agradecer a toda la familia Minutos de Amor, de la que ustedes, queridos lectores y distribuidores de este Manual de Oración, son parte fundamental, pues con su apoyo muchos jóvenes como yo, podemos seguir diciéndole “sí” al Señor, para ser instrumentos de su gracia. Les ruego que no dejen de apoyar esta obra de evangelización. Que la Santísima Virgen María, Nuestra Señora de Monguí, bendiga sus vidas y sus hogares.
Ferney Enrique Pérez Pérez
Seminarista II año de Teología
Diócesis de Duitama-Sogamoso
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Edición Enero 2015
¡LES AGRADEZCO CON TODO EL CORAZÓN!
Las bendiciones de Dios no están en las cosas sino en las personas con las que nuestras vidas se cruzan; personas que nos llenan de alegrías, esperanzas y muchas experiencias que nos forman y nos permiten ver la acción de Dios en nuestras vidas. Por esta razón aprovecho este momento para agradecer a todas las personas que con su apoyo directo o indirecto han hecho posible no únicamente mi ordenación, sino una experiencia de Dios, de su esperanza, de su misericordia y de su amor. Agradezco a cada una de las personas que han estado, están y espero que siempre estén apoyándome, para continuar un camino a la santidad, desde la vocación que Dios ha llamado: el sacerdocio. Agradezco con todo el corazón a la Familia Minutos de Amor, ya que de su mano he recibido un apoyo constante e incondicional en mi camino vocacional, viendo cómo crezco hasta llegar a mi presbiterado. Confío en que el Señor los continuará bendiciendo.
Luis Alexander Peñuela. Pbro.
Diócesis de Engativá
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