S. FELICÍSIMO
Radio Vaticano
Hoy, 26 de octubre, la Iglesia conmemora a los SANTOS ROGACIANO Y FELICÍSIMO, quienes murieran probablemente martirizados en el año 256, en Cartago durante la persecución de Decio. Rogaciano, nacido en frica, fue presbítero de la Iglesia de Cartago y Felicísimo, laico de la misma Iglesia. San Cipriano hace un gran elogio de ellos, diciendo que dieron un buen testimonio de Cristo, por lo que se supone que murieron mártires.
Unidos, pues, a la Iglesia de frica y a los muchos que hoy siguen con su ejemplo de vida dando testimonio de Cristo, brindemos nuestro sincero aplauso a los Santos Rogaziano y Felicísimo.
Meditación
QUERIDO ROGACIANO: desde la penumbra de la historia, cuéntanos algo de tu vida. Cartago fue para mí el lugar de los desafíos que puso Dios en mi vida. En el tiempo del Emperador Decio, quien no era nada amigo de los cristianos, al contrario, dio órdenes precisas para que nos eliminaran, nosotros formábamos un grupo muy activo de la Iglesia de Cartago, nos reuníamos con frecuencia, orábamos juntos y ayudábamos a cristianos y no cristianos en sus necesidades materiales. Allí conocí a un compañero, Felicísimo, con quien juntos empezamos a enfrentar duras pruebas. Yo veía en él a una persona tranquila y sabía que en los momentos en que el pueblo furioso se oponía a nosotros, él sabía como calmar su rebelión. Él, por su parte, había encontrado en mí la persona que lo había guiado en el camino de la fe y le impresionaba, según él decía, mi fe vigorosa y mi bondad. Felicísimo fue detenido y conducido a la prisión. Él me precedió, porque, al poco tiempo, me detuvieron también. Sin embargo, al final de la persecución de Decio, fuimos liberados, pero esto no disminuyó en nosotros, el deseo de dar nuestra vida por Cristo.
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