Aquél día, el vástago del Señor será joya y gloria, fruto del país, honor y ornamento para los supervivientes de Israel. A los que queden en Sión, a los restantes de Jerusalén, los llamarán santos: los inscritos en Jerusalén entre los vivos. Cuando lave el Señor la suciedad de las mujeres de Sión y friegue la sangre de dentro de Jerusalén, con el soplo del juicio, con el soplo ardiente, creará el Señor en el templo del monte Sión y en su asamblea una nube de día, un humo brillante, un fuego llameante de noche. Baldaquino y tabernáculo cubrirán su gloria: serán sombra en la canícula, refugio en el aguacero, cobijo en el chubasco.  «Palabra de Dios. Te alabamos Señor»

SALMO RESPONSORIAL

Sal 122 (121), 1-2. 4-5. 6-7. 8-9

R. Vamos alegres a la casa del Señor.

¡Qué alegría cuando me dijeron: «Vamos a la casa del Señor»! Ya están pisando nuestros pies tus umbrales, Jerusalén. /R.

Allá suben las tribus, las tribus del Señor, según la costumbre de Israel, a celebrar el nombre del Señor; en ella están los tribunales de justicia, en el palacio de David. /R.

Desead la paz a Jerusalén: «Vivan seguros los que te aman, haya paz dentro de tus muros, seguridad en tus palacios.» /R.

Por mis hermanos y compañeros, voy a decir: «La paz contigo.» Por la casa del Señor, nuestro Dios, te deseo todo bien. /R

EVANGELIO

Ven a librarnos, Señor, Dios nuestro, que brille tu rostro y nos salve

Lectura del santo evangelio según san Mateo 8, 5-11

En aquel tiempo, al entrar Jesús en Cafarnaúm, un centurión se le acercó rogándole:- «Señor, tengo en casa un criado que está en cama paralítico y sufre mucho.» Jesús le contestó: – «Voy yo a curarlo.» Pero el centurión le replicó: – «Señor, no soy quien para que entres bajo mi techo. Basta que lo digas de palabra, y mi criado quedará sano. Porque yo también vivo bajo disciplina y tengo soldados a mis órdenes; y le digo a uno: “Ve”, y va; al otro: “Ven”, y viene; a mi criado: “Haz esto”, y lo hace.» Al oírlo, Jesús quedó admirado y dijo a los que le seguían: – «Os aseguro que en Israel no he encontrado en nadie tanta fe. Os digo que vendrán muchos de oriente y occidente y se sentarán con Abrahán, Isaac y Jacob en el reino de los cielos.» «Palabra del Señor. Gloria a ti Señor Jesús»

TeólogoLecturas  Aquél día, el vástago del Señor será joya y gloria, fruto del país, honor y ornamento para los supervivientes de Israel. A los que queden en Sión, a los restantes de Jerusalén, los llamarán santos: los inscritos en Jerusalén entre los vivos. Cuando lave el Señor la suciedad de...Tu adoración diaria al Santísimo - Manual de oración y formación católica